Si yo fuese rector en una universidad, lo primero que haría después de alardear del grado de «magnificus» que otorga el cargo, sería establecer, sin lugar a duda, la jornada de puertas abiertas como único día de asistencia obligatoria común a todos los cursos y, ¿del resto de faltas? Bueno, podríamos hablar… Es posible que oír hablar de «Jornada de Puertas Abiertas» no nos suene del todo sugerente si quien lo organiza no es un parque de atracciones o el McDonnald´s ofreciendo barra libre de McFlurries pero, al igual que saborear los sprinkles de chocolate de este famoso postre, pasarte por el Open Day de una universidad puede cambiarte la vida. ¿Qué es un Open Day? Empecemos por aclarar qué es una jornada de puertas abiertas u Open Day, por su nombre en inglés. Se trata de uno o varios días de libre acceso a las universidades para que los futuros estudiantes y sus familias puedan visitar la universidad, explorar el campus y las residencias, descubrir las diferentes carreras, cursos y oportunidades que ofrece, participar en los workshops, asistir a charlas orientativas de las diferentes carreras con alumnos y personal docente y experimentar el ambiente universitario. ¿Qué puedo hacer en el Open Day? Si todavía estas ejerciendo tu legítimo derecho a no tener muy claro qué estudiar, pasarte por un Open Day y bucear un poco en las metodologías, las asignaturas que componen una carrera, las posibles salidas laborales o simplemente, qué ponente te ha caído mejor, pueden ayudarte a aclarar esas dudas. A lo mejor, ya sabes qué quieres estudiar, pero lo que no has decidido aún es dónde. Durante los Open Day, pegatina de visitante en pecho, podrás moverte dentro del campus como un estudiante más y entrar, literalmente, hasta la cocina. ¿A quién no le gusta la sensación de colarse por puertas con un cartel que dice Staff only? Entre sándwich y refrigerio podrás recorrer de arriba abajo las instalaciones, visitando gimnasio, cafetería, laboratorios, aulas, zonas comunes, bibliotecas, salones de conferencias, jardines, los dormitorios de las residencias etc. Teniendo en cuenta que la universidad que elijas es el lugar donde pasarás gran parte de tu tiempo y harás relaciones durante los siguientes años, es importante también poder saborear el ambiente que se respira e imaginarte recorriendo los pasillos entre clase y clase. Tendrás la posibilidad de hablar con los estudiantes y, además de resolver tus dudas sobre aspectos académicos, quizás conozcas gente afín a ti, con las mismas inquietudes y motivaciones y acabes el día pensando: «Holly guacamole, this is where I belong!» Está muy bien procrastinar y dejar los platos sin lavar hasta el último momento, pero ¡no hagas lo mismo con la elección de tu universidad! Apúntate a un Open Day y empieza a disfrutar de sentirte universitario desde este mismo momento. Mientras el COVID no nos deje volver a la normalidad, ¿sabéis que ahora los Open Days son VIRTUALES? ¡APÚNTATE!